La joven costarricense de 27 años fue la primera persona con discapacidad en convertirse en Regidora Municipal en su país. Su lucha en defensa de los Derechos Humanos la ha posicionado como un referente en el tema. En su artículo para el libro La región que viene: miradas sobre Centroamérica destaca la importancia de la representatividad de los diversos sectores; especialmente, las juventudes desde la intersectorialidad.
El director de la Iniciativa El País Que Viene, Diego Echegoyen Rivera, entrevistó a Nicole Mesén en Costa Rica y en esta conversación, la coautora detalló que su artículo es “muy vivencial” y en él quiso “transmitir a las juventudes lo que ha vivido para llegar donde estoy”.
Su mamá fue su gran motivación. “Ella me dio las herramientas para aprender a defender mis derechos y sembró en mí la semilla del activismo”, dijo.
En su mensaje a la juventud centroamericana hizo énfasis en su rol para incidir y propiciar cambios. “Hago un llamado a la juventud para que podamos incidir, aún con miedo. Que no importen los obstáculos; que podamos lograr lo que nos propongamos y que podamos transformar la sociedad, las realidades y las personas, en el espacio en donde estemos”.
Considera que la juventud es uno de los grupos de la sociedad que ha sido históricamente vulnerabilizada “precisamente, porque nos dicen que por falta de experiencia, por falta de edad, por muchos factores no podemos incidir en los diferentes espacios; sin embargo, soy fiel creyente de que las juventudes nos hemos empoderado, hemos levantado la voz para influir en diferentes espacios y entre ellos, en varios espacios de toma de decisiones. Los jóvenes están presentes”.
Al ser consultada sobre el futuro, aseguró que lo ve de una manera muy optimista. “Me gusta ser positiva en ese aspecto. Me veo trabajando en el activismo y si estoy donde estoy, estoy abriendo camino es porque a futuro las personas van a llegar a donde llegué”.
